Woolrich es fiel a la tradición, por eso muchos de sus productos se siguen produciendo en la primera fábrica que se abrió en Pensilvania. La marca se hizo popular tras firmar un contrato para crear ropa para una expedición a la Antártida. Las colecciones de invierno incluyen tanto chaquetas aislantes capaces de soportar temperaturas extremadamente bajas como prendas para paseos por el campo. Las cálidas chaquetas de plumón están hechas de tejido cortavientos con propiedades hidrófugas. Los productos tienen un aspecto moderno y actual gracias al uso de aislantes naturales y pieles como decoración. La empresa fue una de las primeras en equipar las prendas exteriores masculinas y femeninas con cremalleras. Los modelos de marca de camisas, jerseys y pantalones se fabrican con lana y algodón de alta calidad. Las prendas se distinguen por una discreta gama de colores. La elección de estilos y estampados es limitada. Woolrich se adhiere a un concepto conservador.