El creador de las Kangaroos estaba convencido de que nada es más importante que las pequeñas cosas, y tenía razón: las zapatillas con un bolsillo donde esconder las llaves y un par de billetes doblados causaron sensación entre los aficionados al deporte y los atletas profesionales. Han pasado 35 años desde la aparición del primer par, y las Kangaroo siguen arrasando en los escaparates, porque además del famoso bolsillo, se distinguen por su fiabilidad, eficacia tecnológica y perfecta anatomía de construcción. Aunque esta marca no es tan conocida como otras especializadas, sus productos no tienen nada que envidiar a los de Adidas, Nike y Asics. Las zapatillas de la marca se fabrican utilizando innovadores sistemas de amortiguación y material de membrana ROOSTEX a prueba de humedad, que se utiliza para revestir el interior del producto.